Donde el corazón me lleve
¿Cuántas veces te has dicho algo bonito?
¡Pues claro! Muy pocas.
Y es que a mi se me olvida el decirme cosas buenas, es como pensar que no las merezco, o no soy digna de ellas.
Nos hartamos agradeciendo a la vida por todo lo que tenemos… y yo pienso ¡que coño! ¿Gracias a la vida? Para nada.
Gracias a mi, que me levanto todos los días a las 06:30 de la mañana, trabajo 18h diarias, llevo mi casa, mi hija, e intento tener vida social, para no perder los amigos que me quedan.
Gracias a mi misma, por las noches de desvelo, por dormirme encima de las teclas del ordenador, y por quedarme dormida hablando con un cliente porque WhatsApp, hasta que se me caía el teléfono a la cara.
No pienses que lo que tienes ha sido obra del destino o suerte.
Todo lo que tienes, tanto lo bueno como lo malo, ha sido un resultado de todo lo que has hecho en tu vida.
Todo lo que tu solito has ido sembrando.
Ahora es el momento es recoger todos esos pedazos, e ir construyendo todo aquello con lo que soñaste un día.
Muchas veces pensamos que no somos merecedores de todo lo que tenemos, pensamos que no hacemos tanto, para tener todo, ¿Sabes
como se llama eso? Síndrome del impostor. El síndrome del impostor es un fenómeno psicológico que hace que aquellas personas que lo padecen sientan que nunca se encuentran a la altura de las circunstancias o que sean incapaces de aceptar que merecen lo que han obtenido como fruto de su trabajo.
Pues lo mismo pasa en la vida social, en ocasiones pensamos que no somos merecedores de todo lo que nos viene, boicoteamos cada uno de nuestros pasos, pero luego somos los que damos consejos de matrícula de honor a nuestros amigos.
Como decía mi abuela María: vendo consejos y para mi no tengo
Y ahora tu dirás ¿y esta que nos viene a contar y a decir?
Pues que lo estás haciendo bien, sea lo que sea, lo estás haciendo bien.
Que estas creando desde el corazón, que estás intentando crecer poniendo todo tu empeño, y que estás haciendo todo esto por conseguir algo.
Que obviamente la vida no va a ponértelo fácil, y que mil veces pensarás que no has elegido bien, vuelve a intentarlo, vuelve a hacerlo.
Busca 100mil maneras de darle la vuelta, cambia la manera, pero nunca cambies el objetivo.
Hemos llegado a esta vida para cumplir nuestros sueños, pero los sueños solo se cumplen trabajando.
Mira hacia atrás, mira todo lo que has avanzado, y sigue adelante.
Lo estás haciendo bien, mucho más que bien.
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